jueves, 30 de diciembre de 2010

Qué.es.sanar? (parte 328328910312)

El 2010 se acaba y muchos de nosotros probablemente empezaremos a hacer nuestras resoluciones fin de añeras prometiéndole al viento.. a la arena.. a la playa... e incluso a veces al Eterno, un cambio, objetivos para cumplir, etc. etc.

Yo? a pesar de que ya me tildaron de pesimista, no prometo mucho para el proximo año, probablmente más del 2010. Tengo temor a las cosas nuevas en cierta manera, asi que mejor me quedo con lo conocido, así sin muchas espectativas hay menos con qué golpearse cuando uno cae... y duele caer contra el asfalto.

Este año me he dado cuenta en cierta forma que he cambiado bastante... he aprendido mucho sobre la soledad y sobre como manejarla (con la ayuda del Eterno), aprendí sobre como saber cuando callar o hablar de esto... volví a aprender que a la gente no le gusta la gente triste. Me dí cuenta que soy conciente de toda mi situación y que probablemente mucho de mi cambio (léase mejora) depende de mi y no de otros.

Quizás me tome un tiempo para relatar lo aprendido en este año.. quizás.

Lo que me he dado cuenta en esta persecución de la felicidad, es que al parecer nunca hay final. Y que si te quedas estancado como me pasó, verás cómo un montón de personas con la más buena voluntad del mundo te animan, te jalan, te arrastran a ser feliz pero son tan felices que de pronto se casan de cargar muertos y te dejan y se van. Curiosamente tengo la certeza que tu no tienes, que mi novia no me habría dejado moribundo. Esa es la diferencia de estar completo o de andar amputado por el mundo.

Qué es sanar? a ver si el 2011 me trae aunque sea un dieciseisavo de respuesta.

Desde hace más de tres años cada miércoles me visto con un jean.. un polo blanco de cuello piqué y mis zapatillas Puma Ouninpohja, que es técnicamente la vestimenta que traje el miércoles 19 de diciembre en que Janina se fue (joder... pasan los años.. y sigue pareciendo ayer y sigo sin creer que se fue). La diferencia es que el miércoles que acaba de pasar me olvidé por completo. Un día después cuando repare del hecho me avergoncé de mi mismo.

Si sanar es eso... olvidar? NO, no quiero sanar.

Hace una semana por primera vez en tres años tomé por asalto la cocina de mis padres y preparé brownies. Salieron muy ricos debo confesar, pese a que los hicimos en el micro ondas. La última vez que cociné fue junto con Janina, en su casa. Me encantaba estar con ella en la cocina, todo parecía tan orquestado, tan organizado, tan ordenadito, tan sincronizados ambos, mismo ese nado bonito que hacen las chicas. Me animé a cocinar como ejercicio de terapia. Me sentí bien. La extrañé es cierto, pero me sentí bien. Pero ella no probó los brownies, aunque a poco que le iban a gustar, no le gustaba los chocolates, ni las rosas ni los peluches, gran trabajo de galán que tenía yo.

Si sanar es cocinar, para ella aunque ella no lo pruebe. entonces, no quiero sanar.
El año se acaba, y encontré esta foto de la mueca de ella. Una mueca que me traía de puntitas a sus labios. Ella decía que yo hacía una mueca que era "su fin", que le encantaba. Cuando vi está foto me emocioné, es de tarapoto, donde todo empezó, cuando vi estas fotos recordé las palabras de nuestro Nobel, Varguitas y pensé:
Yo también tuve mi Patricia, yo también tuve mi Julia, pero la mía se llamaba Janina Tuesta Viveros.
Lo que puedo pensar de este año es, que realmente estoy mil veces y mil veces otra vez y mil veces mil agradecido de haber tenido a Janina en mi vida. Esa bendición es única. Qué me vió?, ni idea, solo sé que me acompañó. Y en palabras de ella... yo la arreglé. Creo que ambos fuimos bendecidos.

Lo único que puedo decir al finalizar este año es que gracias al Eterno, en parte todo lo que aprendí al lado de ella... no fue en vano.

Gracias a tí por estár aquí.


Compartir este post en: facebook

1 comentario:

Unknown dijo...

Olvidar un ritual no es que ya se te olvido sino que ahora es parte de tí...y no tienes que vestirte para recordarla.
¿Cómo entender porque ella se fue? Dany...yo estando tan lejos igual la recorde el 19 ... y le agradeci a Dios xq la conoci y con ella aprendi de muchas cosas que la primera impresion no siempre cuenta...y me enseño a quererte aún cuando ella no este aqui...
El 2011 sera lo que tiene que ser pero de la mano de Dios sera mejor.