Hoy 8 de julio, Jani hubiese cumplido un año más con nosotros, unos preciosos 33 años. Recuerdo con mucho cariño como me gustaban los 8 de julio. Como para ponerle la nota curiosa a mi vida, pasaba que la mujer que amaba había nacido el mismo día que mi madre. Esas anécdotas con las que sazonas tus días.
Decía que recuerdo con mucho cariño esta fecha porque me gustaba mucho crear sorpresas para ella, desde dejar escondidas notitas en su departamento junto con pequeños "Doña Pepas" (y eso que a ella no le gustaban los chocolates), como me gustaba llenarla de perfumes, mimarla, me encantaba lo sencilla que era, y como antes de recibir pensaba en agradecer a Dios por todo ese años y las oportunidades que había recibido. Recuerdo que incluso antes de dejarme "invertir" en un buen regalo, ella prefería que ahorremos para nuestro apartamentito.
Son todos estos recuerdos los que me inundan hoy, miércoles.
Esta semana que va pasando no es nada buena, he hecho cosas de las que tengo suma vergüenza. He tratado de refugiar e ignorar el dolor pero no ha servido. Hacerme al loco, o esconderme en el trabajo tampoco. Lo peor es que el dolor está pero las lágrimas no, entonces no sé como sacar todo esto de mi, y esta vez creo que si debo sacarlo.
Si lees esto y no hay una secuencia de ideas, me disculparás pero así esta mi mente, inquieta.
Alguna vez le escuche a Maggy hablar sobre el "día en donde empieza su nueva vida", es una idea interesante, un momento para cerrar y abrir, una oportunidad para continuar dejando todo lastre, es como cuando te dejas de sonseras y de pensar en que necesitas algo para estar bien con Dios y simplemente te abrazas de la gracia, de Jesús.
Hoy, 8 de julio, es el primer día de mi nueva vida. Me rehúso a caer en la pena, y a extrañar con dolor, si extraño quiero tener "saudade" (esa palabrita que Jani me enseño al regreso de su viaje al brasil). Hoy decido AMAR con todas mis fuerzas. Por ninguna forma creo que deba estar revolcándome en la pena y decir que alguien tan maravillosa como ella ha pasado por mi vida, es inconsecuente. Hoy decido, empezar bien. Hoy decido NO seguir mi vida como ha venido siendo. Hoy decido cosechar todas esas cosas lindas que Jani sembró en mi. Hoy decido que este 8.de.julio es mi día a la vida.
Puedo estar triste, puedo extrañar pero gracias a Dios no caigo en desconsolarme, tengo la certeza de un final distinto, de alegría luego de todo este dolor.
Como dije, no puedo ocultar tras toda esta pena, todo lo maravilloso que ella me dio y me dejó.
Agradezco a Dios, por todo, todo lo que me ha dado. Una vez más quedo asombrado de la bendición que fue tener a Jani conmigo. Empecé a escribir con un nuevo en mi garganta, termino esto positivo, tranquilo, seguro -no por mi- sino por lo que Dios me da.Hoy, 8 de julio, con saudade lo declaro mi Día a la Vida. La vida que Dios dio a Jani, la que me da a mi.
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