miércoles, 25 de marzo de 2009

Cuando alguien se va (y un poco de envidia)

Esta semana ocurrió un accidente en Lima, ciudad en la que vivo, donde un periodista fue uno de los afectados, dias después en luego de la operación que le hicieron en busca de su recuperación falleció. No soy bueno para resumir este tipo de historias, ni tampoco creo que se deban resumir.

Hoy al caminar hacia mi trabajo pensaba en Juliana, la chica que se quedó sin Alvaro (el periodista), sin su otra mitad.

Desde que Jani nos dejó caí en la idea de que nadie comprandería exactamente lo que me pasa, ya que somos tan diferentes todos los seres humanos, pero nuestras experiencias pueden paracerse un poco, y quedarse amputado -partido por la mitad- de un momento a otro cuando pensabas que ya estabas completo para el resto de tus días, es quizás algo que podríamos compartir ella y yo, que nos quedamos aquí aún.

Me molesta que la prensa (a mi parecer) se aproveche de estas situaciones para que egoístamente busquen lucrar, no sé cuántos medios en realidad pero encontre dos esta mañana, Ojo y Trome. Me molesta esa forma oportunista que tienen de "importarle" la vida de la gente cuando es conveniente.


He caido en la conclusión tardía que todos los seres humanos somos importantes para alguien. Cuánto me hubiese gustado que el planeta entero dejara de rotar y todos pararan cuando Jani se fue, cuánto me hubiese gustado que nos den la misma o más atención que a ustedes. Sé que es egoísta, pero es lo que siento ahora, perdonen. Hoy, año tres meses y nueve días después son pocos, muy pocos los que se acuerdan de Jani, ojalá no pase lo mismo con Juliana y Alvaro.

La gente en estos momentos suele ponerse muy estúpida, la cordura se les desaparece y sus cerebros creen que es mejor decir "algo" en vez que callar y solo abrazar. A veces salen con un: "La vida sigue.. ", "El (ella), no hubiese querido que te pongas triste", "No puedes estancarte, debes continuar", "Así es la vida", "Debes ser fuerte no debes llorar" y puedo continuar pero me darían nauseas.

Juliana, solo espero que te dejen llorar y mucho, es lo que necesitas ahora. Sé lo qué es quedarse sin futuro, sin amor, en vacío, es un horror que no muchos comprenden.

Tengo pensado escribirte algo, he aprendido algunas cosas que me gustaría compartir contigo, no te voy a decir que lo he superado porque no es así, pero si podría contarte mi experiencia. Si para algo nos suceden las cosas es para ayudar a otros.

Oraré mucho por tí, Juliana.


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